Banco de Chile presentó resultados financieros POSITIVOS en el 1T22. El emisor comenzó el año con una buena dinámica, favorecido principalmente por la exposición estructural de sus activos a la inflación, asimismo, el incremento de la tasa de intervención y una estructura de bajos costos de fondeo llevaron a una expansión del NIM de cartera en +151pbs A/A (5,1%). Así las cosas, a pesar de un fuerte crecimiento del +76% A/A del gasto de provisiones producto del reconocimiento de gastos adicionales y un ajuste en el modelo para el perfil crediticio del segmento comercial mayorista y minorista, asimismo como, un leve incremento de los gastos operacionales, la utilidad neta cierra nuevamente en máximos (CLP 291,727 MM), con un crecimiento del +80,1% A/A y un ROAE 12 meses que repunta a 23%. Finalmente, la calidad de cartera 90 días se mantiene por debajo de los niveles prepandemia, asimismo como, el índice de cobertura total se fortalece, pasando de 354,14% en el 1T21 a 439,55% en el 1T22.