Bancolombia presentó sus resultados del primer trimestre del 2025, los cuales consideramos como POSITIVOS, con una Utilidad Neta por encima de nuestras expectativas.

Bancolombia reportó resultados positivos en el 1T25, con una Utilidad Neta de COP 1,74 billones, que creció 4,5% T/T y 18,4% A/A, reflejando solidez operativa y una rentabilidad sostenida. A pesar del repunte moderado en el Gasto Neto de Provisión (+3,4% T/T), la disminución de 5,9% A/A sugiere una mejora en la calidad del portafolio que le permite mantener un margen de ganancia atractivo. El ROE se mantuvo fuerte, con un 16,3% trimestral y 15,8% a 12 meses, lo que posiciona al banco con métricas destacables frente a sus pares.

El resultado estuvo apalancado en una reducción del 7,7% en los Egresos Operacionales, gracias a menores gastos estacionales en bonificaciones, tecnología y mercadeo. Esta eficiencia se reflejó en un Índice de Eficiencia de 49,6%, mejorando frente al trimestre anterior. Aunque el Costo del Riesgo se ubicó en el límite superior del guidance (2,0%), se mantuvo dentro del rango esperado de 1,8%–2,0%

En términos de margen financiero, se observó estabilidad en los Ingresos Netos por Intereses y el NIM, soportados por una reducción del Costo Total del Fondeo (de 4,62% en 4T24 a 4,20% 1T25). La Cartera Bruta se contrajo levemente 0,3% T/T, afectada por la revaluación del COP, pero creció 3,0% T/T y 1,3% A/A en términos reales. Destacamos el crecimiento en Vivienda (13,6% A/A) y Microcrédito (27,7% A/A), lo que refleja una originación selectiva y diversificada.

La Calidad de la Cartera mejoró, con una reducción de la mora >30 días a 4,64% y de la mora >90 días a 3,17% para el trimestre, especialmente en Consumo y Microcrédito. En cuanto al Fondeo, los Pasivos con Costo cayeron 2,3% T/T por amortizaciones estratégicas y reducción de deuda, manteniéndose una estructura sólida liderada por Depósitos de Ahorro y a Término. Consideramos que estas decisiones refuerzan la eficiencia del fondeo y la resiliencia financiera del banco en un entorno de transición de la política monetaria.