Diciembre 2025 Top Picks Colombia y MGC - Perspectivas 2026: Los motores del nuevo ciclo

El 2025 ha sido un año excepcional para la renta variable colombiana. El repunte del MSCI COLCAP con valorizaciones en niveles del 50%, sin incluir dividendos, respondió a un entorno donde, por primera vez en varios años, distintos frentes comenzaron a empujar en la misma dirección. Este giro de sentimiento abrió espacio para que una serie de decisiones corporativas, dividendos y un entorno macroeconómico a favor de economías emergentes, se convirtieran en detonantes de valor para el mercado local. 

A pesar del fuerte rally de 2025, en Aval Casa de Bolsa estimamos que el mercado accionario local aún tiene espacio para seguir valorizándose en 2026. Según nuestras proyecciones, el valor objetivo del MSCI COLCAP se ubica alrededor de los 2.360 puntos, lo que implica un potencial del 14% frente al precio de cierre de noviembre. Este potencial se fundamenta en: una recuperación económica paulatina en Colombia, rezago de algunos nombres frente al rally del Colcap, continuación de apetito por mercados emergentes, y la expectativa de mayor claridad política luego de la segunda vuelta, tras un inicio de año marcado por alta volatilidad electoral. Además, varias compañías aún mantienen potencial de valorización frente a sus múltiplos históricos y el índice todavía muestra rezago respecto a mercados comparables de la región.

Para el 2026, consideramos que el desempeño del mercado estará marcado por una trayectoria de tasas más incierta, donde la inflación persistente y el mensaje restrictivo del Banco de la República limitarán los recortes y harán que cada dato mensual cobre relevancia. Aun así, la solidez mostrada por las empresas en 2025 (mejores márgenes, mayor generación de caja, dividendos competitivos y programas de recompra como el de Grupo Cibest) ofrecerán un soporte fundamental para el mercado. Sobre este telón de fondo, las elecciones presidenciales añadirán volatilidad, ya que un giro pro-mercado facilitaría el cierre de brechas de valoración, mientras que un escenario de continuidad mantendría la prima de riesgo elevada, en un entorno donde varios emisores aún muestran márgenes de seguridad atractivos.